Capítulo 9: Llanto Sin Consuelo

Capítulo 9

                  Llanto sin consuelo

Jim estaba arrojado en la cama practicando con la espada, pensaba atravesar el cuerpo de ese estúpido hombre sombra.

Entonces el gritó de Walt lo emocionó:

-         Jim, Tlaw y yo logramos averiguar donde está Merida.

Jim bajó corriendo.

El amor entre Oswald y su nueva novia inundaba el ambiente.

Era una gatita gris llamada Hortensia, usaba falda rosa y sombrero rosa.

-         Y... ¿cuál es tu color favorito?- preguntaba Oswald

-         El rosa, ¿y el tuyo?

-         Azul...

Minnie rodaba los ojos.

Mientras tanto Hippo hablaba con Astrid.

-         Astrid, en serio lo lamento

La chica se limpiaba las lágrimas.

-         Pero... ¿Por qué quieres romper conmigo?

-         Es que, ¿Recuerdas a la chica pelirroja?

-         A Merida

-         Sí, no puedo dejar de pensar en ella, es tan... bella, tan linda, es tan...- Hippo suspiró

-         Oh, ¿Así que me vas a dejar por una escurridiza pelirroja? ¿Qué es lo que te hizo? ¿Qué tiene que yo no tenga?

-         Astrid, yo...

-         Ah, ya entiendo, antes de que desapareciera te fugaste a su cuarto y tuvieron una ronda de amor...

-         ¡No! ¡Qué asco! ¡Además ella tiene novio!

-         Ja, siente lo que es que te rompan el corazón.

Astrid se limpió las lágrimas y salió corriendo, Rapunzel fue tras ella.

-         Lamento lo que pasó

-         Lo oíste- se angustió Astrid

-         Lo gritaste

-         ¿En serio? Es que eso me puso tan... triste

Astrid se apoyó en el hombro de Rapunzel y la chica la abrazó, se habían vuelto muy buenas amigas.

-         Tranquila, Hippo y Merida jamás podrán estar juntos, ella ama a Jim demasiado

-         ¿En serio?

-         Te lo aseguro

Astrid sonrió a medias y volvió a llorar.

Hippo se acercaba a Jim:

-         Jim, me gustaría acompañarte a buscar a Merida

-         Ah, ¿Sí?- Dijo Jim- ¿Por qué?

-         Bueno digamos que... ella me gusta un poco...

Jim se sintió furioso y frunció el ceño, le dio un puñetazo en la mejilla.

Chimuelo se acercó dispuesto a atacar a Jim.

-         No, Chimuelo, no lo lastimes- dijo Hippo débilmente- Auch, es normal que haya hecho eso... tampoco me agradaría.

Jim tomó a Hippo de la playera y lo levantó en el aire.

-         Escúchame bien, rata escurridiza, si te atreves a tocar a mi novia, a dirigirle la palabra, a tan siquiera pensar en ella, te mató.

Hippo se hartó y pateó a Jim en el estómago.

Vanellope venía siendo perseguida por las dos pequeñas pero al ver la pelea se detuvo.

-         Hey, esperen, una pelea

Hairy y Maddie sonrieron.

-         Pelea, pelea- gritaron a la vez

Las tres se sentaron en una mesa para disfrutar la pelea, los trillizos se sentaron con ellas.

Hamish fingió bostezar y abrazó a Hairy.

-         Así que te gustan las luchas, lindura

-         Así es- Hairy se sonrojó.

Maddie rodó los ojos.

Jim soltó a Hippo por el dolor, el cuál se arrastró por el piso.

Chimuelo golpeó a Jim con su cola. Jim pateó a Chimuelo en el estomago.

Entonces Rapunzel se interpuso entre los dos chicos y el dragón.

-         Hey, ya basta

-         Cabelluda déjanos ver la pelea y no te interpongas- gritó Vanellope

-         ¿Perdón? Señorita, ¿Qué son esos modales?- regañó Rapunzel

-         Tú cuida tus modales, para qué lo sepas soy la presidenta de Sugar Rush.

-         ¿Y a mi me importa? No estamos en Sugar Rush, me respetas

Hairy giró los ojos.

-         Mamá, perdona a Vanellope, se le zafó un tornillo

Vanellope frunció el ceño.

-         A mi no se me zafó un tornillo

-         Se le zafaron diez- intervino Ralph

-         Yo digo que ya no tiene tornillos- gritó Maddie

-         Nunca tuvo- gritó Harris

-         Cállense- gritó Vanellope

-         Bueno, ya estuvo bien de peleas- dijo la “cabelluda”

Todos suspiraron.

Walt vio a Jim y a Hippo.

-         Y ustedes dos, dejen de pelear, que ya tenemos suficientes problemas

Ambos bajaron la cabeza como perros regañados.

Walt llamó a los viajeros: Rapunzel, Jeremy, Jim, Hippo, Aladdín y Astrid que se acababa de ofrecer. También Tlaw iría con ellos.

Les dijo unas palabras, todos subieron por sus armas y municiones y se despidieron de sus seres queridos.

Entraron a un portal y desaparecieron.

Hairy presentó a Maddie con los trillizos.

A Harris le gustó Maddie.

Salieron a jugar a las escondidillas.

  CAMBIO DE TRAMA

Thor y Jane habían salido de el hospital, estaban en la casa de Jane.

-         Desde que te fuiste conseguí un muy buen puesto y ahora vivo aquí- contaba Jane

-         ¿Y qué hay de Eric y Darsy?

-         Los ayudé y se compraron una linda mansión.

-         Lamento que tengas que cambiar tu vida por mi culpa...

-         No me molesta cambiar mi estilo de vida, a lo que temo es que mi vida está en riesgo, seré “Thorina”, una vengadora...

-         Vamos, puedes hacer algo

-         No...

-         Yo me siento débil

-         Te irá bien como agente de S.H.I.E.L.D. aunque dudo que sepas mucho sobre el planeta

-         Yo también lo dudo

Ambos suspiraron. Se voltearon y se miraron fijamente, los ojos de Jane se llenaron de lágrimas

-         Thor, tengo mucho miedo... demasiado... mi vida corre mucho riesgo

Thor le secó las lágrimas a su amada.

-         Yo también tengo miedo, temo por ti, no quiero que te pase nada... Si pudiera te protegería...

Jane asintió, ambos se abrazaron y así se mantuvieron por un largo rato, después se alejaron y sus labios se acercaron y se besaron.

Jane subió a su cuarto.

Dejó un par de cosas y luego salió hacia otro cuarto, tenía una cama muy grande, un sofá y un armario lleno de prendas de hombre.

-         Yo... te preparé esto esperando tu regreso, compré mucha ropa de tu talla... aunque supongo que luego volverás a Asgard

Thor bajó la mirada.

-         Ya no existe Asgard.

-         ¿Qué?- gritó Jane

-         Sí, Loki lo destruyó todo, por suerte logré escapar, mis padres, mis amigos... Todo fue destruido

-         Oh, Thor, no sabes cuanto lo siento, en serio lo lamento

-         Pero ahora tengo una nueva familia, tú y yo, ambos, juntos.

Jane sonrió.

-         Y tal vez dentro de pocos años haya un tercer miembro- dijo ella.

-         Esperemos

Jane sonrió.

-         ¿Eres católico? Claro, no lo creo, un dios creyendo en dios

Thor levantó una ceja.

-         Olvídalo

-         Lo haré

Ambos se sonrieron.

CAMBIO DE TRAMA

Taron estaba en una de las casas de los indios, lo estaban atendiendo muy bien.

Le habían curado sus heridas y le habían dado de comer alimentos deliciosos.

Pocahontas estaba afuera de la casa conversando con John Smith.

El hombre acababa de llegar en una balsa, John Ratcliffe se había logrado fugar de prisión y ahora iba tras Smith.

-         ¿Ratcliffe viene hacia aquí?- preguntó la princesa india

-         No, el no viene aquí

-         ¿Cómo lo sabes?

-         El me dijo que iría a un lugar llamado. Atlántida o algo parecido.

-         ¿Él te lo dijo?- preguntó ella dudando de el marinero

-         No exactamente, lo oí conversar con uno de sus secuaces.

La chica asintió.

-         Me alegra volver a verte

John Rolfe se acercó inmediatamente.

-         Taron esta en buen estado, estuvo a punto de morir gracias a una herida en su costado pero logramos curarle.

Pocahontas sonrió y se metió a la casa.

-         ¿Te encuentras bien?

-         Así es

Ella sonrió y salió.

Taron recordó detalle a detalle todo lo que había pasado:

Elena y él caminaban en le bosque por la noche.

-         Taron, tengo miedo, no deberíamos de estar aquí.

-         No te preocupes, todo saldrá bien

-         ¿Estás seguro?

-         Muy seguro

La chica sonrió.

Llegaron a una fogata.

-         Elena, hace mucho que quería decirte esto, yo... te... amo

Elena sonrió.

-         Yo a ti... también

Ambos se acercaron y cuando estaban a punto de besarse una carcajada lo invadió todo... El rey del mal salió del suelo.

Taron abrió bien grandes los ojos.

Venía acompañado de unos gemelos de cabello naranja, uno traía un parche.

Comenzaron a perseguirlos, llegaron a un barranco, Gurgi y Fausto eran también perseguidos, los gemelos tomaron a Fausto de los brazos y lo metieron a un saco, después golpearon a Gurgi y lo dejaron inconsciente, también lo metieron a un saco.

Elena y Taron estaban al borde del barranco, Elena resbaló:

-         ¡ELENA!- Gritó él

Taron distinguió que Elena logró sujetarse de una rama y luego la princesa bajó cuidadosamente al suelo de ese barranco.

-         Voy por ti

-         De acuerdo

Pero el rey del mal lo dejó inconsciente.

Y eso era todo lo que Taron recordaba, resbaló una lágrima y murmuró:

- Tal vez no sea un príncipe azul Elena, pero te voy a salvar, no dejaré que te pase nada...

CAMBIO DE TRAMA

Elena llevaba tres días en ese barranco, después de llevarse a Gurgi y a Fausto; y dejar a Taron inconsciente, el rey del mal y sus secuaces desaparecieron.

Por suerte para ella había muchos arbustos de moras en el barranco. Se había alimentado de eso: Moras y solo moras.

Entonces un gritó la sobresaltó:

-         Ho... Ho... Hola- dijo una chica

Elena se acercó a esa voz, era una chica con vestido morado el cabello negro hasta los codos, ojos verdes y piel blanca, venía montada en un hermoso caballo blanco.

-         Hola- gritó Elena desesperada

-         ¿Quién eres?

-         Me llamo Elena, ¿Y Tú?

-         Soy Blancanieves (Blancanieves y el cazador)

Elena corrió hacia ella.

-         ¿Qué haces aquí?- preguntó la rubia

-         Estoy buscando a un cazador, mi reino fue atacado y necesito de su ayuda.

-         ¿Por qué?

-         Porque es un viejo amigo y es muy fuerte, además hay unas bestias espantosas que están matando mucha gente

Elena se llevó una mano al pecho espantada.

-         Yo estoy buscando a mi nov... amigo Taron.

-         Bueno, podemos ayudarnos, yo te ayudo a buscar a Taron y tú me ayudas a buscar al cazador ¿De acuerdo?

-         De acuerdo

Elena se montó al caballo y comenzaron la búsqueda mientras charlaban.

CAMBIO DE TRAMA

Facilier recibía una nueva visita, Ravenna, quién era la madrastra de Blancanieves en otra dimensión.

-         Así que... Tú y yo tenemos historias CASI iguales

-         Así es- contestó Grihmilde quién también los acompañaba

-         ¿También conoces a una Blancanieves?- Ravenna no creía lo que oía.

-         Sí, también lo hace, y conoce a un príncipe y a unos enanos, ¿Podemos ir al grano?- gritó Facilier desesperado.

-         Bien, ¿Cuál es el grano?

-         Ambas deben unir su magia... ambas deben de juntarse para acabar cada una con lo que quieren pero antes les tengo una misión.

-         ¿Cuál es?- preguntaron las dos a coro

-         Verán, tristemente hemos perdido a dos de nuestro bando, Gastón y Maléfica, quiero que los devuelvan a la vida y que también nos hagan inmortales.

Las dos brujas asintieron.

Después de mezclar mucho tiempo al fin entregaron su producto a Facilier.

-         Muy Bien- dijo él

-         Sólo hay un problema... hay dos personas que pueden lograr quitar esta poción- dijo Ravenna.

-         Nos encargaremos de terminar con ellos antes

-         Pero no sabemos quienes son

-         No te preocupes, en menos de un año no habrá ni un alma buena por aquí

Los tres soltaron una carcajada maligna.

Las dos brujas se fueron a su misión...

CAMBIO DE TRAMA

Hippo, Astrid, Jim, Jeremy, Aladdín, Rapunzel y Tlaw llegaron al camino amarillo, Walt les había dicho que era ahí donde Merida se encontraba. Al final del camino encontrarían el castillo de Evanora.

Todos caminaban lentamente mientras algunos platicaban, Rapunzel hablaba con Astrid.

-         Una vez tuve una gran aventura, me escapé de la torre y fui a ver las luces flotantes- dijo Rapunzel creyéndose toda una aventurera.

-         ¿Y cuál es el peligro ahí?

-         Bueno, había rufianes y una bruja que quería ser joven...

-         Yo me he enfrentado a un dragón de 100 metros

Rapunzel se quedó callada muy avergonzada.

Jeremy hablaba con Jim.

-         Jim, por favor perdóname

-         No, a menos que tengas una buena razón para haberte ido.

-         Bueno, me fui a buscar oro para mantenerlos a ti y a ti madre.

-         ¿10 años? ¿En serio?

-         Jim, lo qué mas amo en mi vida son tu madre y tú... por cierto... ¿Cómo esta ella?

-         Bien, esta buscando un marido

-         Pero...

-         Tú nos abandonaste, ya no eres parte de nuestra familia

-         ¿Y en dónde dice eso?

-         Es lógica, Jeremy

-         ¿Podrías llamarme papá?

-         No, tú ya no eres mi padre.

Jeremy bajó la mirada.

Entonces unos rugidos atemorizantes sobresaltaron a Tlaw.

-         Bawinos- susurró

Los bawinos voladores se acercaban a toda velocidad.

Evanora venía montada en uno de ellos.

-         Supongo que buscan a su amiga- gritó esta.

Hippo sacó su daga, Astrid y Tlaw un arco, Rapunzel sacó su sartén, Aladdín y Jim sacaron una espada y Jeremy una ballesta.

-         Son tan ridículos- se burló Evanora

Todos se prepararon para pelear.

Los bawinos aterrizaron.

Hippo se enfrentaba a uno espantoso.

-         Niñito débil- dijo el Bawino

Hippo se sorprendió.

El Bawino lo tomó de los hombros y alzó vuelo.

-         Suéltame- gritaba el chico

Le enterró la daga en una de las alas y el alado gritó de dolor pero aún así se llevó a Hippo hacia el castillo.

Rapunzel abrió los ojos asustada, un Bawino se acercaba a ella, tomó su sartén fuerte.

-         No... no te tengo miedo

El Bawino se burló.

La chica alzó el sartén y golpeó al alado en la cabeza.

Este cayó inconsciente.

-         Para que aprendas a no meterte conmigo

Entonces sintió como un Bawino por atrás le rompía el vestido.

Se volteó y lo golpeó en la cabeza con el sartén, pasó lo mismo que con él otro.

-         ¿Qué? ¿Querías verme las pompas?- gritó la “cabelluda”

Jim, Jeremy y Aladdín se enfrentaban a Evanora.

-         Me alegro de su visita, hace mucho que nadie me visita

-         Vete al diablo- dijo Jeremy

Jim atravesó el estomago de la bruja con su espada, esta tan solo sonrió y se sacó la espada, ni una gota de sangre...

Jim se espantó mucho.

Jeremy atravesó la pierna de la bruja con una bala de su ballesta, la bruja rió aún más fuerte.

Sacó rayos de su mano y apuntó hacia el pecho de Jim, este cayó inconsciente al piso.

Aladdín se aventó hacia uno de los bawinos y lo montó después cayó encima de Evanora la cuál terminó acostada en el suelo con Aladdín encima, este tomo la espada y le cortó la cabeza a la bruja.

Aladdín suspiró y se quitó de encima pero se horrorizó al ver que la cabeza de Evanora se movía y se volvía a unir a su cuello.

La bruja sonrió.

Astrid apuntó a un de los bawinos y lo mató.

Sonrió satisfactoriamente pero por atrás Evanora le apuntó con los rayos y también cayó inconsciente.

Entonces Tlaw gritó:

-         Bruja espantosa

Tlaw tenía magia, levantó a la bruja por los aires y la comenzó a dejar sin aire.

-         Te vas a ir

Evanora asintió y se retiró junto con su ejército de Bawinos.

Todos se decidieron por acudir a ver al mago. Había muchos heridos y estaban hambrientos, después con ayuda del mago irían por Merida.

Luego de un largo rato llegaron con el mago.

El los acogió muy bien.

Theodora al ver a Tlaw se quedó sorprendida de su belleza, comenzó a sentir atracción por él... ¿El hechizo se rompería?

Tlaw inspeccionaba a la figura de madera.

-         Es una magia muy poderosa, creo que si tendrán que ir con la persona que hizo esto ¿Están seguros de que fue Evanora?

-         Eso es lo que dice Theodora- aseguró Oz.

-         ¿Tú viste que ella lo hiciera?

Theodora se puso nerviosa.

-         Pues... no hay otra persona tan malvada como para hacerlo.

Astrid comenzó a dudar de la chica.

Tlaw asintió.

-         Por cierto... ¿Te importaría salir conmigo por la noche para discutir esto?

-         No hay problema- dijo Theodora

Astrid y Rapunzel intercambiaron miradas, sabían que había algo ahí. Ninguna confiaba en Theodora.

La niña de porcelana hablaba con Aladdín.

-         ¿Tu esposa te enterró una daga? Eso debió de haberte dolido mucho

-         Me dolió mucho

-         Y me dices que tú tienes un genio que es tu amigo

-         Así es

-         ¿Crees que él podría devolverme a mi familia?

-         Estoy casi seguro

-         ¡Quiero conocerlo!

-         Tal vez pronto lo conozcas

Tlaw al escuchar eso se le ocurrió una idea.

-         ¿Dices que quieres a tu familia de vuelta? Pero si ya tienes una

-         Sí, tienes razón y es la mejor familia del mundo

Oscar y Finley sonrieron.

Mientras tanto en EL CASTILLO DE EVANORA Merida lloraba desconsoladamente, estaba encerrada en una celda, estaba muy enojada con Theodora, esa bruja maldita, pensaba Merida.

Entonces uno de los bawinos se acercó y arrojó a Hippo con Merida.

-         ¿Merida? ¿Qué nos van a hacer?

-         No lo sé Hippo, ¿Jim está aquí?

-         Sí... venimos a rescatarte.

-         Estoy segura de que vendrán pronto.

A Hippo le latía con mucha fuerza el corazón, la chica a la que amaba estaba junto a él llorando y el no podía hacer nada.

- No llores- el chico le acarició la mejilla

Merida se volteó a ver a Hippo confundida mientras su corazón latía casi tan fuerte como cuando Jim la besó...

CAMBIO DE TRAMA

Bella y Adam buscaban apresuradamente la parte de la roca.

Habían buscado en muchas partes pero en ninguna estaba.

Milo estaba  muy angustiado, Kida y Audrey habían desaparecido, muchos equipos trataban de buscarlas pero no lo lograban...

Adam caminaba desesperado cuando un brillo le lastimó el ojo, Bella se dio cuenta y fue a ver de donde provenía aquel brillo.

Era una roca... la roca que tenían que encontrar.

-         ¡ADAM! ¡LA HE ENCONTRADO!

Adam rápidamente sacó la roca de una grieta en la que estaba atascada pero entonces un grito los espantó a todos.

-         FI FAI FOU FU

Un gigante se acercaba a toda velocidad.

-         Para llevarse esa roca tendrán que pasar sobre mi cadáver...

CAMBIO DE TRAMA

Todos dormían muy cómodos en el castillo de Cenicienta

Edward dormía en el cuarto de Tobby.

Ariel y Eric dormían juntos en otro cuarto.

Blancanieves dormía en el cuarto de Marie.

La única que no conciliaba el sueño era Cenicienta, Lady Tremaine la había estado torturando toda la noche por la mente.

-         Ahora están todos dormidos, ataca, muerte, sangre, dos, tan sólo dos corazones.

-         Tengo que esperar...

-         Entonces tomaré el corazón de tu marido y el de uno de tus hijos.

Cenicienta se paró sobresaltada y se dirigió al espejo, se hizo una coleta, abrió uno de los cajones y sacó una daga.

Se metió al armario y se puso un vestido no muy formal color rosa y una capa negra.

Se aventuró al dormitorio de Ariel, tomó la daga con fuerza, la alzó bien alto.

Las lágrimas se resbalaban por sus mejillas mientras deseaba que hubiera otra solución.

Comenzó a bajar la daga dispuesta a quitarle la vida a aquella mujer.

Entonces un gran brillo invadió la habitación, era el hada madrina. La chica se sobresaltó tanto que cayó al suelo tirando la daga.

-         Hada madrina... ¿Qué haces aquí?

-         Me alegra haber llegado a tiempo, reúne a todos, tienen que irse de aquí.

-         Pero... mi madrastra matará a mi esposo...

-         Yo te protegeré.

Cenicienta siguió las indicaciones de su hada madrina y despertó a todos, se vistieron y llegaron con el hada madrina.

Gus, Jack, los demás ratones, Anastasia (la cuál se había quedado en el palacio con el panadero), el panadero, Ariel, Edward, Marie, Tobby, Cenicienta, Blancanieves, Charming y los demás habitantes del castillo estaban cruzando un portal hacia el castillo de Walt.

Tan sólo faltaban en pasar Charming, el panadero, Cenicienta y el hada madrina.

Entonces apareció Tremaine, traía una varita.

-         Mocosa Mugrosa

-         Ustedes pasen, yo la distraigo- susurró el hada madrina quién hacía un campo de fuerza

-         Pero...

-         Yo tengo magia, pasen.

Mientras los demás se metían al portal el hada madrina y Tremaine tenían un complicado combate.

Tremaine lanzó fuego y el hada madrina lo esquivó, la malvada mujer se acercaba hacia el portal, el hada comprendió que no había otra solución más que...

Todos ya habían pasado excepto el hada, Tremaine iba tras ellos.

El hada se interpuso entre el portal y Tremaine.

La anciana logró cerrar el portal antes de que Tremaine atravesara su corazón con una daga.

La vida del hada madrina expiró...

CAMBIO DE TRAMA

 Facilier jugueteaba con sus estatuillas, todo en su plan estaba saliendo bien, repasó mentalmente el plan:

Las sombras se habían aburrido y estaban hambrientas, después de muchas suplicas le dieron una oportunidad más a Facilier, después todos los villanos resucitaron, el plan era fácil, convertir a algunas personas en estatuillas y alimentar a las sombras con ello, matar y desaparecer, tenían que conseguir a Oswald y a Mickey, volverlos obscuros y con eso reinarían y tendrían mucho poder, después las sombras les darían mucho poder y ningún corazón noble continuaría con vida... 

Entonces Facilier se metió a su habitación, ahí había una gran bolsa que se movía, la abrió y de ahí salió Mickey Mouse, este dio pasos para atrás mientras intentaba escapar.

Facilier chasqueó los dedos y las sombras aparecieron, las sombras se encimaron en Mickey, este soltaba gritos de dolor.

Finalmente las sombras se alejaron y apareció un Mickey con el ojo rasgado, pantalón negro y uñas muy filosas, tenía colmillos de al menos 10 cm.

Mickey había perdido su corazón, ahora era un ser obscuro y despiadado.

-         Ahora a buscar a Oswald- dijo el hombre sombra- pero antes tengo un asunto pendiente, quédate aquí

Mickey sonrió maléficamente mientras salía a ver al resto de los villanos.

Obscuridad, eso era lo único que había en el pequeño ratón.

Facilier se dirigió a la sala de su casa.

Todos los villanos iban y venían, algunos descansaban en los sillones mientras que pensaban en su venganza.

Facilier localizó a la única persona ahí que no era realmente un villano, Anastasia.

-         Anya, es hora de recibir tu recompensa

Anastasia corrió hacia Facilier llena de esperanza, al fin volvería a tener su final feliz.

Pucca la siguió.

La chica entró a una habitación, la fuente se encontraba ahí.

Jafar apareció por arte de magia.

Facilier sonrió y chasqueó los dedos, un Dimitri lleno de heridas estaba tirado en el suelo.

-         Dimitri- gritó la chica

Salió corriendo y cuando estaba a punto de tocarlo chocó con una especie de pared invisible.

-         ¿Quién te dijo que él sería tu recompensa?- se burló Jafar- Oh, espera fui yo

La chica perdió toda esperanza.

-         Tu recompensa será estar a salvo, en cuanto a él... No creo que se quede a salvo- gritó Facilier

-         No, por favor, no le hagan daño

Los dos se rieron macabramente mientras Anya se esfumaba.

La chica apreció en el castillo de Walt.

  CAMBIO DE TRAMA

Walt daba la bienvenida a los recién llegados, mientras los alojaba.

Cenicienta y compañía; y Anya.

Oswald y Hortensia caminaban de la mano en un jardín lleno de rosas.

-         Eres muy bonita

-         Y tu muy guapo

El amor se respiraba en el ambiente.

Ambos estaban muy enamorados aunque apenas acababan de verse.

Se daban besos y abrazos.

Mientras tanto Cenicienta lloraba la segura muerte del hada madrina, ya que ella no había llegado a salvo.

Pero la que peor estaba era Anya, era una torpe, la vida de cuatro personas peligraba por su culpa y... ¿Para qué? Ni siquiera le dieron de vuelta a Dimitri, era una tonta.

Se sentía muy culpable así que se acercó a Walt y apenada le dijo:

-         Disculpe. Por mi culpa hay cuatro personas atrapadas con los villanos y yo...

-         No es tu culpa, Facilier te obligó

-         Pero me siento muy culpable

-         Tu no eres culpable

Anya aún así no se sentía a gusto.

Mientras tanto Vanellope estaba escondida debajo de una mesa, Hairy estaba contando ahora.

La niña levantó su cabeza dispuesta a ver pero se pegó en la cabeza con la mesa, estaba a punto de gritar cuando vio a Hairy entrar al castillo, Vanellope tuvo una idea, había una araña colgando de su telaraña debajo de la mesa, la corredora tomó la telaraña y la lanzó a la cabella de la rubia.

Hairy comenzó a sentir que algo caminaba en su cabeza y entonces comenzó a gritar como una loca, sabía que era una araña y comenzó a correr, Kida notó lo que pasaba y fue a tranquilizar a la pequeña, entonces un gran trueno los espantó a todos y un personaje muy temido apareció ahí...

 CAMBIO DE TRAMA

Los Cullen se encontraban conversando, todos excepto Bella y Renesmee que estaba con la bruja.

Bella se encontraba muy enojada por lo que Edward le había dicho, se sentía furiosa.

Su esposo se acercó a la chica.

-         ¿Me perdonas?

Bella se volteó dispuesta a decir que no pero al ver que su esposo traía flores no tuvo más remedio que besarlo.

-         Si quieres por la noche podemos...

-         ¡No! Primero quiero que te disculpes con Renesmee, después de eso tal vez te de tu premio

Edward rió y asintió.

Renesmee corría a su casa con un pastel en las manos, ya estaba obscureciendo así que decidió que lo comería de desayuno.

La pequeña se puso el pijama y subió a su cuarto, estaba a punto de dormirse, cuando sucedió algo muy extraño, Edward tocó la puerta, él casi nunca entraba.

-         ¿Qué sucede, papi?

-         Quería hablar contigo

-         ¿Conmigo?

Edward se metió a la cama con su hija, y la abrazó.

-         Quiero que sepas que lamento lo que dije, tan solo quiero que estés a salvo

-         No hay problema pero... ¿Si hubiera una forma de hacerme humana normal, lo harías?

Edward se esforzaba por no leer los pensamientos de su hija pero le era imposible.

Aunque ella era muy lista y pensaba en unicornios y no en el encantamiento.

Edward arrulló a su hija hasta que se quedó dormida, ella le recordaba a Bella de muchas maneras, el vampiro no podía evitar sonreír, hacia mucho que su hija había nacido pero el no pasaba mucho tiempo con ella.

Bella entró y sonrió, después dijo:

-         Ya estoy lista, ¿Vienes?

El vampiro dejó a su hija sutilmente en la cama y la tapó después de darle un beso.

La niña despertó muy temprano y bajó a la cocina.

El pastel estaba en la mesa.

Recordaba las palabras de su padre pero ¿Qué tanto daño le haría el pastel?

No sabía si comerlo o no, entonces tomó su decisión...

CONTINUARÁ...